Fuerza Cero

Tras 11 días en "otra dimensión", había olvidado ya la existencia de mi pequeña creación. Pero hoy, por fin se encendió la luz del recuerdo y aquí regreso de nuevo a mis historietas.

De estos días habría mucho que destacar pero me voy a centrar en lo que normalmente no se cuenta, que para eso quizá empecé este blog, porque todos tenemos cosillas que no se cuentan, quizá por vergüenza, por orgullo o simplemente por reservación.Pues bueno, estos días no han sido animicamente muy buenos. Mientras tenga una jefa, como única compañera de departamento y mientras ella sea "doña perfecta", mi moral estará por los suelos.

Llevo varios días aguantando estoicamente, como una gran campeona, que no sé hacer las cosas, que parece que hablamos idiomas distintos y que ya podría haber espabilado. Y claro, un día, tras otro día, tras otro día, una, que siempre ha sido algo carente de autoestima, termina creyéndoselo.Pero no vale que sea una crack del mundo de los viajes, de los ordenadores, que cuando estoy motivada sea la persona más eficiente del mundo... no, para ella soy poco más que un "trozo de carne" puesto aquí para responder el telefono (oooooooooh, importante tarea la que me toca).Y eso, después de mi salida de la oficina, se sigue notando. Se me quitan las ganas de hacer cosas, estoy de mal humor, contestataría (justo con aquellos que me dicen que para nada soy tan ineficiente), y estoy totalmente apática.

Aquí, la chica más hipereactiva del mundo, sólo piensa en estar en su casa metida en una cama. Que ironía no?Todos los trabajos son duros, casi siempre te topas con un jefe o un compañero que te hace la vida imposible, pero si a eso le sumas que encima el trabajo en sí te parece una M, pues "apaga y vamonos".

La otra noche me llamó Cd y terminé llorando como una magdalena. Llevo tanto tiempo acumulando que a poco que me tires de la lengua, salen cosas por mi boca que sorprende a quien me escucha.Y está la opción más sencilla... ¿Porque te no te lo dejas? Pues porque ahora mismo, en estos momentos, encontrarme no me encuentro ni motivada para seguir buscando otra cosa que me guste (otro sintoma más de tener la autoestima en las antípodas). Quizá por el "sindrome de Estocolmo", de pensar... bueno, quizá no es tan ogro, quizá la culpa era mia, puede que me encuentre a alguien peor...

Ahora necesito unas vacaciones como el comer. Una desconexión total de unos 7/8 días de mi puesto de trabajo. Mi medico me hubiera dicho que "una baja laboral", pero no me puedo permitir eso. No me puedo permitir cogerme una baja y no explicar el motivo (obviamente todos lo sabemos). Es dificil de entender si no has pasado por algo igual.

En fin, sólo me queda esperar... mañana ya es viernes y tendré por delante dos días y medio para "medio recuperarme", hasta que el lunes vuelva a sonar el despertador a las 07.30 de la mañana y vea, con horror, que aún me queda una larga semana por delante.